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B’nai B’rith y la Declaración Balfour: Un trabajo tras bambalinas

Artículo de B’nai B’rith Chile en Revista Shalom edición febrero 2022

Por Cheryl Kempler (B’nai B’rith International), Traducción y adaptación de B’nai B’rith Chile

En un ambiente de emoción desbordante, y después de algunos discursos de líderes y representantes, lo que había dado una estampa de solemnidad y formalidad. La jornada finalizó con fuertes vítores, a lo que la audiencia respondió con un instantáneo canto del “Hatikva”, el himno sionista, que más tarde, sería adoptado como el himno nacional del sueño materializado en el Estado judío de Israel.ranscurría el domingo 2 de diciembre de 1917. La Royal Opera House de Londres, estaba en su total capacidad, desbordándose incluso hasta la calle. ¿La razón?, una multitud de personas, judíos y cristianos, habían venido a expresar su gratitud por un párrafo de tan solo 67 palabras, el cual, es conocido hasta nuestros días como la “Declaración Balfour”. Nombrada en honor a quien fuera su principal redactor, el secretario de Relaciones Exteriores, Arthur James Balfour. En ella, Gran Bretaña manifestaba su respaldo formal para el establecimiento de un hogar nacional judío en Palestina.

Si bien B’nai B’rith en sus inicios manifestó una política neutral hacia el sionismo, ello no fue impedimento para que muchos de sus miembros abrazaran la causa con entusiasmo y pertenencia, especialmente aquellos que formaban parte de las logias de Londres y Manchester, jugando un importante rol en los eventos que condujeron a la redacción y aceptación del conocido mensaje que Lord Balfour enviaría al barón Rothschild, destacado miembro de la comunidad judía de Gran Bretaña.

B’nai B’rith en Inglaterra, fue un fiel reflejó del espíritu de cambio y democracia que se vivía en la época.

Los rápidos cambios sociales y políticos, debilitaron el control de las clases con títulos nobiliarios y terratenientes. Estos vientos de cambio, provocaron la formación de la Primera Logia de Inglaterra, en Londres específicamente, ciudad en la que se encontraban destacados hombres de negocios, religiosos, académicos y periodistas. Entre los miembros provenientes de esta ilustrada Logia, que trabajaron para dar forma concreta al sueño de una patria judía, estaban el rabino Moses Gaster, líder en ese entonces de la congregación sefaradí más grande de Londres; Herbert Bentwich, un eminente abogado que había fundado la Federación Sionista Británica en 1899; Selig Brodetsky, profesor de matemáticas y futuro presidente de la Universidad Hebrea de Jerusalén; y Paul Goodman, secretario tanto de la Primera Logia como de la Federación Sionista Inglesa.

A pesar de las diferentes opiniones sobre el sionismo, los miembros de Londres lanzaron proyectos de gran beneficio para la comunidad judía, particularmente después del comienzo de la Guerra Mundial en 1914, momentos en los cuales Gran Bretaña enfrentaba la llegada de inmigrantes de Europa del Este y Rusia. Estos apuntaban a brindar apoyo y servicios legales gratuitos, acceso a comida Kosher, entre otros, atendiendo las necesidades de los recién llegados al país. La logia también publicó folletos diseñados para educar a gente fuera de la comunidad en temáticas sobre la historia y las costumbres judías, de modo de facilitar la inclusión de los nuevos llegados.

Por su parte, B’nai B’rith de Manchester, hogar de sionistas provenientes de Alemania y Rusia, así también de un importante grupo de lugareños devotos del presidente de la logia, su amigo y mentor, el Querido Hermano Chaim Weizmann. Científico, profesor universitario, quien posteriormente se convertiría en el primer presidente de Israel. Dentro de sus miembros más emblemáticos, también podemos encontrar a Nahum Sokolow, un periodista y diplomático nacido en Rusia, e Israel Sieff, un pilar financiero y editor de la revista Palestina.

A través de su afiliación con una organización filantrópica como B’nai B’rith, Weizmann tenía la intención de obtener apoyo para el sionismo desde adentro de la comunidad. Trabajando para el Ministerio de Municiones en 1914, Weizmann realizó experimentos que condujeron a la optimización en la fabricación de armamento. Sus logros y aportes, lo hicieron conocido dentro de las altas esferas de la sociedad inglesa, donde utilizando sus conocidas habilidades diplomáticas, tuvo la capacidad de convencer a los funcionarios públicos de los beneficios de crear un hogar para los judíos en Palestina, tras la ansiada victoria aliada sobre las fuerzas turco-otomanas, que gobernaban la zona.

David Lloyd George, quien fuera el primer ministro de Inglaterra en diciembre de 1916, un cristiano devoto, estuvo de acuerdo con Weizmann, en la convicción de que una Palestina judía correspondía a una ordenanza bíblica, y también, estaba convencido de que el apoyo de los judíos, podría ayudar a inducir a Rusia y Estados Unidos a apoyar y sumarse a Gran Bretaña en la guerra.

El Primer Lord del Almirantazgo, Sir Arthur Balfour, nombra-do ministro de Relaciones Exteriores en el gabinete de guerra de Lloyd George, también favoreció el concepto de una Palestina judía. El percibir a los judíos, no solo como una religión, si no más bien como un pueblo, lo motivó en su convicción de que “una gran nación, sin hogar, no está bien”.

A medida que avanzaba la guerra, el sionismo, anteriormente apoyado por una no despreciable minoría judía, adquirió cada vez un número mayor de adeptos, aunque muchos judíos temían que la profesión de lealtad a su religión o etnia, llevarían a cuestionar su patriotismo para con Inglaterra.

Ya en 1915, los líderes judíos, incluidos Weizmann y otros en B’nai B’rith, entendieron la necesidad de desarrollar una posición unificada sobre los problemas de la posguerra que eran más apremiantes para los judíos de Europa. Después de intensas discusiones, debido a los diferentes puntos de vista existentes entre los miembros de la Primera Logia de Londres, se acordó buscar “la formulación de una opinión comunitaria unida sobre el problema judío…siendo eminentemente deseable, para la Primera Logia, el asociarse con el Comité de Manchester, los hombres que ayudan a Weizmann… con el propósito de cooperar con las organizaciones comunitarias existentes en reuniones con el gobierno británico”.

Después de una serie de charlas sionistas organizadas por el Comité de Manchester, el informe con los resultados de estas conversaciones fue entregado a B’nai B’rith de Londres. Tras lo cual, los Hermanos de Londres, organizaron el Comité de Emergencia Judío, compuesto por Weizmann, Bentwich, Gaster, Sokolow y Goodman. El informe de este ultimo, señalaba tanto el imperativo de la igualdad de derechos y la ausencia de persecución como “la demanda de la creación de una comunidad judía autónoma que sirva como el centro de la raza judía”. Este informe, llamado “Palestina y los judíos”, fue posteriormente presentado al Parlamento Inglés en nombre de B’nai B’rith, el cual, obtuvo una serie de respuestas altamente favorables.

En 1917, B’nai B’rith y sus miembros fueron parte significativa de la compleja cadena de eventos que culminaron en la realización de los esfuerzos de Weizmann. Corría el mes de febrero, momento en el cual, el administrador del gabinete de guerra, Sir Mark Sykes, organizó una reunión de funcionarios del gobierno británico y líderes sionistas, entre los que se encontraban Weizmann, Bentwich y Sokolow, en la casa del rabino Gaster. Durante los meses de abril, mayo y junio; Sokolow, en su calidad de diplomático, participó en conversaciones con el Vaticano y Francia. Sus negociaciones dieron como resultado la aprobación de cada uno de los gobiernos, de la propuesta de permitir que Gran Bretaña administrara Palestina de forma exclusiva. En discusiones diplomáticas con los Aliados, que resultaron en la renuncia a su derecho a controlar el territorio, también se le encomendó la elaboración de un plan largo y detallado para el gobierno de la futura entidad sionista, con contribuciones añadidas por Weizmann, el editor Sieff y otros.

El 18 de julio, el líder de la comunidad judía, Lord Lionel Walter Rothschild, presentó su versión del documento que condensaba lo principal del reporte de Sokolow. Este documento, fue revisado por Balfour, quien adoptó su redacción: “El gobierno de Su Majestad acepta el principio de que Palestina será re-constituida como el hogar nacional del pueblo judío y utilizará sus mejores esfuerzos para asegurar el logro de este objetivo y estará listo para considerar cualquier sugerencia sobre el tema que la Organización Sionista desee presentar ante ellos”.

En octubre, Sir Alfred Milner y Leo Amery, ambos miembros del Gabinete de Guerra; volvieron a redactar el borrador, insertando un lenguaje que aseguraba los derechos de los judíos en cualquier lugar que habitaran y salvaguardaba la protección de los árabes que vivían en Palestina. Aunque, todavía faltaban semanas para la victoria británica que ya se avizoraba en el territorio controlado por los turcos otomanos; la Declaración Balfour en su redacción final, se escribió como una carta dirigida a Walter Rothschild, el segundo barón de Rothschild, y se le entregó el 2 de noviembre.

“Estimado Lord Rothschild.

Tengo gran placer en enviarle a usted, en nombre del gobierno de su Majestad, la siguiente declaración de apoyo a las aspiraciones de los judíos sionistas que ha sido remitida al gabinete y aprobada por el mismo.

El gobierno de su Majestad ve favorablemente el establecimiento en Palestina de un hogar nacional para el pueblo judío y usará sus mejores esfuerzos para facilitar el logro de este objetivo, quedando claramente entendido que no debe hacerse nada que pueda perjudicar los derechos civiles y religiosos de las comunidades no judías existentes en Palestina, o los derechos y el estatus político que disfrutan los judíos en cualquier otro país.

Estaré agradecido si usted hace esta declaración del conocimiento de la Federación Sionista.

Arthur Balfour”

Mientras los judíos reaccionaban eufóricamente en todo el mundo, el Querido Hermano Sokolow comentaba entonces:

“De inmediato quedó claro que un gran momento en la historia del pueblo judío había llegado a través de esta Declaración… Grandes nuevos horizontes de trabajo constructivo nacional libre se revelan ante nuestros ojos. El destino de la tierra judía depende no solo de la poderosa protección de los gobiernos, sino ante todo de la firmeza y la capacidad de sacrificio del propio pueblo judío”.

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Día Internacional de Recordación de las Víctimas del Holocausto 2022

En el Salón O’Higgins del Ministerio de Relaciones Exteriores, el día jueves 27 de enero de 2022, se realizó una nueva conmemoración del Día Internacional de Recordación de las Víctimas del Holocausto.

El acto organizado por B’nai B’rith, la Comunidad Judía de Chile y el Ministerio de Relaciones Exteriores, junto con el apoyo del Museo Judío de Chile y Memoria Viva; contó con la conducción de nuestro Coordinador de Asuntos Públicos, Bartolomé Abramovich; quien junto con Marcelo Cohen, presidente de la comisión Emet, representaron a nuestra institución.

El acto contó también con la participación de la Subsecretaria subrogante de Relaciones exteriores, embajadora Gloria Navarrete; junto con la de Marina Rosenberg, embajadora de Israel en Chile; Christian Hellbach, embajador de Alemania en Chile; y Stephan Vavrik, embajador de Austria en Chile.

Por medio del encendido de siete velas, se simbolizó el recuerdo de las víctimas del Holocausto, entre ellas, seis millones de judíos, un millón de gitanos, 250 mil personas discapacitadas, nueve mil homosexuales y todos los disidentes políticos asesinados por los nazis y sus colaboradores.

Por su parte, la señora Ana María Wahrenberg, fue la encargada de transmitirnos su sentido testimonio. Participaron también miembros de la denominada «Generación y Media», compuesta por niños que nacieron durante o terminada la guerra, muchos de ellos en campos de refugiados, esperando las visas para poder emigrar, todos ellos desplazados de Europa, quienes no vivieron en primera persona la guerra, pero sí, han tenido una vida están cargados con las consecuencias de ésta. Este grupo, fue representado por: Werner Apt, Sol Kalderón, Ana Schwartz, Pedro Keller, Manfred Seidemann y nuestro QH Bernardo Trewik.

La liberación de Auschwitz, hace ya 77 años, fecha que da origen a este día de conmemoración, nos conmina a impedir que se repitan genocidios y atropellos a los Derechos Humanos, en ninguna parte del mundo. En consecuencia, rememorar estos episodios en una ceremonia como esta es justo y esencial para evitar que situaciones como la del Holocausto vuelvan a ocurrir.

El año 2005, Naciones Unidas aceptó por unanimidad la sugerencia de Silván Shalom, ministro de Relaciones Exteriores de Israel, de recordar cada año en esta fecha a las víctimas del Holocausto. En honor a los seis millones de judíos, gitanos, personas discapacitadas, homosexuales, masones,  disidentes políticos, y todos aquellos perseguidos y asesinados por los nazis y sus colaboradores. 

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Fecha límite: 1 de febrero

La Conferencia de Wannsee: una oportunidad para educar

Artículo de B’nai B’rith Chile para Revista Shalom – edición enero 2022

Por Daniel S. Mariaschin, Director ejecutivo de B’nai B’rith Internacional

En años previos al ascenso del nazismo en Alemania, B’nai B’rith era la más grande de las organizaciones judías alemanas, acogiendo al año 1933, a más de 100 logias en el país.

El principio del fin ocurriría en 1937, cuando las SS, cerraron por la fuerza nuestra organización en territorio alemán. Los judíos que no salieron de Alemania a principios de 1939, en ese entonces más de 400.000 cuando Hitler llegó al poder, tendrían ya firmado su triste desenlace.

El día 20 de enero de 2022, conmemoramos el 80° aniversario de la Conferencia de Wannsee.

Infame reunión de funcionarios nazis, en la cual, se sella la aprobación a la denominada por ese entonces “Solución final a la cuestión judía”.

A modo de contexto, en el momento de realización de esta reunión, las Leyes de Nuremberg, los decretos discriminatorios dirigidos a los judíos alemanes, ya habían estado en vigor durante más de seis años. La guerra había asolado Europa desde el 1 de septiembre de 1939, tras la invasión nazi de los territorios polacos, resultando los judíos de las regiones afectadas, detenidos y asesinados.

La reunión de Wannsee, que lleva el nombre de la villa ubicada a las afueras de Berlín, donde tuvo lugar la reunión. Aquella fue convocada por Reinhard Heydrich, por ese entonces director de la RSHA (Oficina Central de Seguridad del Reich), cuyas ramas incluían la Gestapo y la organización de seguridad interna, las SD. Con la asistencia de quince representantes de alto rango de los ministerios del Tercer Reich y oficinas relacionadas, incluido entre ellos Adolf Eichmann, quien se desempeñó como secretario de actas de la reunión. En tan solo síolo 90 minutos de duración, Eichmann presentó una lista de las poblaciones judías, tanto en las regiones ocupadas por los nazis, como en los países aliados o “estados títeres” de Alemania, así también, de las pocas naciones europeas que gozaban de libertad. La discusión, se centró en la deportación de los judíos al “Este”, donde trabajarían hasta la muerte o serían asesinados en masa. Las notas de Eichmann sobre la reunión, estaban redactadas con eufemismos, pero el mensaje de Heydrich era claro para todos: los judíos de Europa iban a ser liquidados.

Según declaraciones hechas por Eichmann en su juicio por crímenes de guerra en Israel, hubo un entusiasmo generalizado por el plan entre los presentes.

La teoría racial nazi en pleno juego

Otro de los temas en discusión en Wannsee, se centraba en la definición de lo que constituía un judío. La teoría racial nazi, estaba en pleno juego aquí, ya que los participantes discutieron cuántos abuelos judíos o parejas no judías eran necesarios para establecer la judeidad de la persona; si los hijos de matrimonios mixtos se criaron como judíos o cristianos, determinarían si uno era judío o no. Al final, toda esta discusión hizo poca diferencia al minuto de llevar a cabo la Solución Final.

Hasta el momento, solo se han encontrado escuetas notas y unos pocos minutos de grabación sobre la conferencia. Se cree que cualquier otro registro hecho por los participantes, fue probablemente fue destruido en los últimos días de la guerra.

La Villa de Marlier transformada en un lugar de memoria y educación

Construida en 1914, la Villa Marlier de Wannsee es recordada por la reunión de 1942 que determinó el destino de los judíos de Europa. Hoy conocida como Haus der Wannsee-Konferenz, funciona como un centro educativo y un monumento a las víctimas de la Solución Final. Tuve la oportunidad de visitarla hace algunos años en una misión de líderes judíos a Berlín.

Sus habitaciones, se han convertido en galerías en las cuales, se expone permanentemente la muestra “La conferencia de Wannsee y el genocidio de los judíos europeos”.

Ocho décadas después, el término “Solución final” sigue siendo escalofriante, resultándome difícil y estremecedor, incluso al momento de escribir estas palabras, especialmente cuando recuerdo aquella visita al lugar donde se zanjó el macabro destino de mi familia y nuestro pueblo.

La mesa, alrededor de la cual se reunieron los oficiales nazis todavía está allí. Un cartel en cada lugar con el nombre de cada uno de los asistentes, nos recuerda el espacio que cada uno ocupo durante la conferencia. También es posible encontrar sobre ella, una lista de los países europeos y sus poblaciones judías, la cual fue utilizada durante la discusión y marcaría el triste destino, que tan solo tres años a partir de esa fecha, tendría como resultado que la mayoría de los territorios europeos, sería despojado de la totalidad —o casi— de sus comunidades judías.

Detengámonos un minuto, y pensemos en lo escalofriante que resulta lo “profesional” de la “solución” propuesta por Heydrich, Eichmann y sus secuaces y colegas en el crimen.

Un plan de asesinato en masa, que sellaría el destino de seis millones de judíos en Europa, el que se decidió en tan solo 90 minutos.

Es un imperativo que al recordar el Holocausto debamos personalizarlo, darle cara a nuestras victimas, victimarios y procesos. No sea que las barbaries realizadas por los nazis y sus colaboradores, durante un período tan corto de tiempo, se transforme con el paso del tiempo y la historia, simplemente en una confusión de la historia que, a medida que nos alejamos del Holocausto, disminuya la enormidad y total devastación de los judíos europeos. Nunca debemos olvidar la magnitud de discutir alrededor de una mesa y en una hora y media, el destino de tantos, que, para nuestro pueblo, resultó en seis millones de asesinatos, seis millones de vidas perdidas.

En el caso de mi familia, particularmente la de los parientes de mi madre en Lituania, su destino estaba sellado seis o siete meses antes de Wannsee, cuando los nazis marcharon sobre el país en 1941 y comenzaron una campaña que vio, solo un año y medio después, a más del 90% de su población judía asesinada, la mayoría en propio suelo lituano. No se molestaron en deportar a esos judíos; la mayoría fueron simplemente rodeados y fusilados en barrancos y bosques. En el bosque donde se llevaron a mis parientes, murieron unos 11.000 judíos, y con ellos, muchos de los pequeños shtetels y pueblos de la región.

Después de todos mis años de estudiar el Holocausto, visitar sitios como ese en Lituania, conectados con mi familia; o los Campos de Concentración en Alemania, Polonia y otros lugares, y trabajar en programas de restitución y recordación del Holocausto, resulta frustrante constatar que los judíos europeos fueron totalmente abandonados. Hitler dejó claras sus intenciones todos los días, su ideario y macabro plan de exterminio, solo culminó con esa reunión del 20 de enero en Wannsee.

La comunidad internacional tuvo nueve años para hacer algo, cualquier cosa para prevenir o interrumpir sus designios genocidas, pero nada sucedió.

El deber de la educación

Estudios recientes revelan que, la mayoría de los Millennials y de los Generación Z de los Estados Unidos, no pueden nombrar un solo Campo de Concentración, ni tienen la menor idea de cuántos judíos fueron asesinados en la Shoá. Alrededor del 10% de los encuestados en uno de estos estudios, arroja que cree que los judíos mismos contribuyeron a su propia desaparición.

El fallecimiento de Leon Kopelman hace tan solo unos meses, quien fuera el último luchador conocido del Levantamiento del Ghetto de Varsovia, es un llamado más a la acción urgente para promover la educación sobre el Holocausto, y que, esta no solo debe ser dentro de nuestra comunidad, sino, especialmente fuera de ella. El paso del tiempo e Internet, han permitido que la negación del Holocausto se convierta en uno de los principales ingredientes del repunte del antisemitismo contemporáneo.

Fueron necesarios 90 minutos para sellar el destino de nuestros hermanos y hermanas en Europa. En su memoria, como comunidad y como B’nai B’rith, tenemos el firme compromiso de contar su trágica historia, nuestra trágica historia.

Debemos hacer todo lo posible, por hacer que esta, no se repita en ningún rincón del mundo.

En memoria de Roberto Garretón, defensor de los Derechos Humanos

Articulo de LaPalabraIsraelita.cl del 31 de diciembre de 2021

Por Bartolomé Abramovich, Coordinador de Asuntos Públicos B’nai B’rith Chile

¿Habrá alguien en Chile que iguale el caudal de vidas humanas rescatadas de las mismas puertas de la muerte, como lo hizo Roberto Garretón, actuando personalmente en los tribunales militares de la dictadura, con su valiente presencia, su eminente profesionalismo y su obstinación por la justicia?”.

Carta de B’nai B’rith Chile al Instituto Nacional de Derechos Humanos para la postulación de Roberto Garretón a Premio Nacional de Derechos Humanos 2020.

Jurista, catedrático, diplomático y, un incansable obsesionado por la justicia y la protección del hombre. El lunes 27 de diciembre por la madrugada, a los 80 años de edad, falleció uno de los más grandes luchadores por los Derechos Humanos en nuestro país, el abogado Roberto Garretón Merino. Orgulloso abogado de la Universidad de Chile, una persona que siempre estuvo del lado de las víctimas, entregando su conocimiento, vida y energía en pos de la defensa de la vida y de la dignidad de las personas.

De un currículum extenso, destacamos las siguientes labores durante su carrera: abogado del Comité de Cooperación para la Paz y de la Vicaría de la Solidaridad durante los años de la dictadura; embajador ante organismos de Derechos Humanos durante el gobierno del presidente Patricio Aylwin; vicepresidente de la Comisión de DDHH de las Naciones Unidas y de la Conferencia Mundial de Derechos Humanos de Viena; abogado del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados. Estos son solo algunos de los cargos que tuvo durante su gran carrera el abogado Roberto Garretón Merino.

También fue un destacado miembro del Consejo del Instituto Nacional de Derechos Humanos y miembro, desde 1990, del Directorio del Instituto de la Mujer.

En una ceremonia cargada de emoción, amistad y recuerdos, Garretón recibió el Premio “René Cassin a los Derechos Humanos” del año 2019, la más alta distinción otorgada por B’nai B’rith en Chile. Entregado desde el año 1987, este premio lleva el nombre de quién fuera el principal autor y co redactor de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y premio Nobel de la Paz, el además jurista judío y miembro de B’nai B’rith, René Cassin, quién hizo famosa la frase: “No habrá paz en este planeta mientras exista un solo lugar donde se violen los derechos humanos”.

Roberto Garretón fue galardonado por B’nai B’rith en reconocimiento a su trayectoria de vida en la promoción y enseñanza de los DD.HH., basados en los valores de la Fraternidad y la Concordia, a través de las herramientas del Derecho, Diplomacia y la Educación. Una persona intachable y de gran calidad humana.

Nuestro reconocimiento dio origen a la posterior presentación, por parte de nuestra institución, del abogado Garretón para recibir la más alta distinción en materia de DD.HH. de nuestro país, el Premio Nacional de Derechos Humanos.

B’nai B’rith Chile, junto a organizaciones de la Sociedad Civil y personalidades de diversas áreas y colores políticos, postulamos a Garretón como Premio Nacional de Derechos Humanos en su edición 2020, el cual fue felizmente atribuido, entre 16 otras postulaciones, a nuestro candidato el día 15 de agosto de 2020. En la ocasión, con respecto al legado del galardonado, el Director Nacional del INDH, Sergio Micco señalo: “Roberto Garretón, tu labor continúa, y seguirá siendo cuidada por nosotros. Parte de tu legado es el INDH”.

Jaime Fuchs, presidente de B’nai B’rith en el periodo 2016-2020, destacó durante la entrega del Premio René Cassín 2019, quién destacó que Garretón pasó de su vida como abogado de causas civiles a una lucha incansable por el cuidado de los Derechos Humanos, en lugares impensados a los cuales su pasión por la justicia y la rabia por las injusticias cometidas en el régimen de Pinochet lo llevarían. Una persona intachable, que tomó grandes riesgos personales, lo que lo llevó incluso a estar preso, pero que con el pasar de los años, salvaría cada vez más vidas de compatriotas.  A su cierre destacó que: “en Roberto Garretón, con su tenacidad, su intransigencia y su modestia, tenemos otro gran e incansable luchador por la causa de los DDHH.”


Premios y condecoraciones

  • 2003: Miembro de la Legión de Honor en grado de Oficial, distinción otorgada por el Gobierno de Francia,
  • 1989: Premio Monseñor Leonidas Proaño, por la defensa de los Derechos Humanos otorgado por la Asociación Latinoamericana para los Derechos Humanos, compartido con personalidades como Rigoberta Menchú, Guillermo Ungo y Paulo Freire.
  • 1993: Premio Ruth Pearce, por el Servicio Internacional de Derechos Humanos, al diplomático más comprometido en la defensa de los Derechos Humanos.
  • 1999: Premio Palme Nationale des Droits de l’Homme, del Consejo Nacional de Derechos Humanos en Islam.
  • 2019: Medalla Rectoral de la Universidad de Chile. Premio Derechos Humanos “Andrés Aylwin Azocar”. Premio René Cassin a los DDHH de B’nai B’rith Chile.
  • 2020: Premio Nacional de Derechos Humanos.
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Renovación de B’nai B’rith Perú

El pasado miércoles 15 de diciembre, nuestra filial peruana, Logia Lima N° 1994, realizó una inédita Logia Cerrada. En ella, fueron iniciados 16 nuevos Hermanos, y también, fue instalada la nueva Oficialidad de esa filial.

La actividad, contó con la asistencia de 32 Hermanos, tanto de forma presencial, como de manera telemática. Fiel reflejo del fuerte y exitoso impulso y revitalización, que han dado la anterior y la nueva directiva a la B’nai B’rith en beneficio de toda la comunidad judía peruana.

En la ocasión, asumió la presidencia de la Filial el QH León Eskenazi Cohen, quién agradeció al presidente saliente, QH Pinkas Flint, y enunció las objetivos principales a lograr junto a los oficiales que lo acompañarán.

La actividad contó con la presencia virtual del presidente, miembros de la Oficialidad y varios Hermanos chilenos del Distrito 27. El QH Boris Kisiliuk, presidente del Distrito 27, que agrupa a las filiales de Chile, Perú y Bolivia; fue el Oficial instalador y el QH Jaime Fuchs, Mentor del Distrito, dirigió los saludos a nombre de todo el Distrito. Ambos destacaron este impulso renovador y desearon el mayor de los éxitos a la gestión del QH León Eskenazi y a la Oficialidad que lo acompañará.

Roberto Garretón Merino (Q.E.P.D)

Con profundo pesar comunicamos el sensible fallecimiento del señor Roberto Garretón Merino (Q.E.P.D).

Galardonado el año 2019 con el Premio René Cassin a los Derechos Humanos, principal reconocimiento otorgado por nuestra institución en Chile.

A su esposa Marisa, familia y cercanos, los acompañamos en estos difíciles momentos, junto con enviarles nuestras condolencias y un abrazo fraterno.

B’nai B’rith Chile

Novemberpogrom: La Noche de los Cristales Rotos

Artículo de B’nai B’rith en revista Shalom – Diciembre 2021

“Hoy en día, no estamos exentos de estas discriminaciones, las que se dan en todas las naciones del mundo. He ahí la necesidad de mantener la memoria del Holocausto, por más que duela. Es una deuda que tenemos con las victimas, con nosotros mismos y las generaciones futuras. La Noche de los Cristales Rotos y el Holocausto, nos recuerdan el precio de dejar que se pisoteen los valores de democracia, dignidad humana tolerancia y justicia.”
Christian Hellbach
Embajador de Alemania en Chile

Con la llegada de un nuevo 9 de noviembre, viene a nosotros la memoria de una fatídica fecha histórica de nuestro pueblo. Aquella noche entre el 9 y 10 de noviembre de 1938, en la cual miles de judíos que vivían en territorios dominados por los Nazis, vieron como 91 hermanos perdieron la vida, otros miles fueron deportados a campos de concentración; y a su vez, observaron consternados como sus sinagogas, negocios y muchos hogares, eran reducidos a solo cenizas.

Año a año, B’nai B’rith, junto al Instituto Hebreo, Comunidad Nueva Bnei Israel, Memoria Viva y  el Museo Interactivo Judío de Chile organizan un acto en recordación de los horrores que como humanidad, no podemos permitir vuelvan a surgir en nuestras sociedades.

Como en cada aniversario, el acto conducido por representantes del Centro de Alumnos del Instituto Hebreo, estuvo enfocado en la educación y promoción del respeto a la diversidad; En esta ocasión, como en oportunidades anteriores, contamos con la presencia de  alumnos de los colegios: Lo Barnechea, Craighouse, Southern Cross, Lincoln International Academy, Saint George’s College, Liceo Rafael Sotomayor y Alemán de Santiago.

Fueron parte de esta conmemoración la embajadora Marina Rosenberg (Israel) y Christian Hellbach (Alemania), junto a representantes del cuerpo diplomático de otros países. Contamos también con la asistencia de la subsecretaria de Relaciones Exteriores, Carolina Valdivia y el Director de Medio Oriente y África, Patricio Díaz.

En el marco de esta conmemoración, y a modo de apertura contamos con un mensaje de Sergio Herskovits, director general del Instituto Hebreo, quien centrado en el respeto de la diversidad humana, cerraba su intervención hablándole directamente a los jóvenes presentes: “Cuando la emoción maneja la esfera pública, lleva a los pueblos a la trastienda de la historia y consigue las atrocidades que llevó adelante el nazismo. Este acto es para invitarlos a convertirse en héroes,… , Chile y el mundo los necesita.”

Gunther Seelman, Edith Grünpeter, Ana María Wahrenberg, Briggitte Callomon, Eva Block de Weiss y Edith Frank; fueron los testimonios de sobrevivientes del también conocido Progrom del Reich, que tuvimos el privilegio de escuchar durante la ceremonia, por medio de videos preparados por la Fundación Memoria Viva.

Posteriormente, fue el turno de Christian Hellbach, excelentísimo embajador de Alemania en Chile, de dar su mensaje. Destacamos de su intervención la siguiente idea: “Los pogromos de noviembre marcan un punto de inflexión en el camino a la Shoá. La Alemania Nazi, que tiempo atrás había pasado de la retorica incendiaria, a una política de discriminación abierta, dio esa noche el paso definitivo hacia la violencia sistematizada y al genocidio. Durante esa noche barbárica, no solo se quebraron cristales de sinagogas y comercios,… murieron personas, …, murió también la esperanza de que todo aquello fuera pasajero, y se acabo de romper el tejido valórico de toda una nación. De mi nación.”

La temática elegida para la conmemoración de este año, fue el proyecto “Guardianes de la Memoria”, iniciativa del Museo Interactivo Judío de Chile, Fundación Memoria Viva, Embajada de Israel en Chile, junto con la colaboración de Yad Vashem y el Archivo Judío de Chile.

Este proyecto busca cuidar los testimonios y recuerdos de los sobrevivientes del Holocausto, de forma activa por medio de “guardianes”, quienes asumen la tarea de continuar con el legado de cada uno de ellos.

En ese propósito, cada uno de los colegios participantes, recibió el libro de Memoria Viva, junto con la misión de cuidar el testimonio y memoria de un sobreviviente en particular. Como representante del proyecto, fue invitado Alejandro Pablo Guzmán, quién contó sobre su experiencia como guardián, sus motivaciones y como llegó a ser parte de este proyecto. La iniciativa comenzó con el compromiso de personajes públicos y líderes de opinión, la invitación es a que nos hagamos parte de este esfuerzo. En esta ocasión, las instituciones educativas invitadas asumieron el desafío, lo que marca una oportunidad de construir una sociedad más inclusiva, empática, en la cual el respeto por la diversidad sea un pilar fundamental.

Encendido de velas

Son seis velas las que tradicionalmente encendemos en representación de las víctimas del Holocausto. Este año, por medio de una intervención teatral de alumnos del Instituto Hebreo, cada vela fue encendida por alumnos de los colegios invitados, en recuerdo y memoria de un sobreviviente: Gerda Wolff, Ewald Wetzstein, Eva Rogazinski, Marianne Rosenbaum, Eva Block y Gunter Seelman, quien este año, nos honró con su presencia y valioso testimonio.  De su intervención destacamos su potente y sentido mensaje de luchar en contra de los discursos extremistas, buscando aislar a esos grupos que han surgido en la mayoría de los rincones del mundo, enarbolando consignas del pasado, que solamente causan odio y traen situaciones negativas para las democracias del mundo.

Tras el discurso de Gunter, el último de los colegios presentes fue invitado a regar una hermosa planta, como símbolo de la importancia de la educación al cuidado del futuro y, al igual que en el caso de las velas, también fue realizado en la memoria del sobreviviente Walter Borcheim. Simbolizándolo en palabras del educador polaco judío, Janusz Korczak (Z.L.):

El que cuida de los días siembra trigo, el que cuida de los años planta árboles, el que cuida de las generaciones educa a las personas”.

Luego, el rabino Alejandro Bloch nos acompaño brindándonos un sentido mensaje y recitando la oración de nuestra tradición, “El Malé Rajamim”, en memoria de los fallecidos y víctimas de la Shoá y de la Noche de los Cristales Rotos.

Acercándose el término del acto y a modo de cierre de este, fue invitada la excelentísima embajadora de Israel en Chile, Marina Rosenberg a brindarnos un mensaje, el cual resumimos en las siguientes palabras: “Existe una relación estrecha entre memoria y futuro, entre la condena de la barbarie y la lucha contra la intolerancia, el racismo y el antisemitismo en los tiempos actuales. La invitación que les hago hoy es que nosotros, sea cual sea nuestra fe, le prometamos a este señor acá sentado que nunca más. Me gustaría queridas y queridos estudiantes, que salgan de acá reflexionando, no importa de que colegio ni religión sean, que hacen para verificar que algo así nunca más ocurra, ni al pueblo judío, ni a cualquier persona aquí en Chile y en el mundo.”

Jánuca en Concepción

El día lunes 6 de diciembre, se llevó a cabo en el Salón de Honor de la I. Municipalidad de Concepción el encendido de las velas de Jánuca, actividad organizada por la Comunidad Israelita de Concepción.

En la ocasión participaron autoridades regionales, miembros de organizaciones civiles de Concepción, instituciones comunitarias, representantes de diversos credos, representantes de la comunidad judía de Osorno y miembros de instituciones que viajaron especialmente desde Santiago para la ocasión. Representando a B’nai B’rith asistieron Exequiel Segall, Secretario General de la institución; y Bartolomé Abramovich, coordinador de Asuntos Públicos.

En la oportunidad y con el encendido de las 8 velas de la Janukía se buscó exaltar los valores universales y la integración por sobre las diferencias: Paz, Solidaridad, Democracia, Diversidad e inclusión, Diálogo, Justicia, Unidad y Esperanza. Las velas de «Diversidad e Inclusión» y «Esperanza» fueron encendidas respectivamente por Exequiel y Bartolomé.

En la ocasión, el alcalde de Concepción, Álvaro Ortíz Vera, destacó que «hemos acogido esta celebración anteriormente, pero ahora, cumpliendo los protocolos sanitarios, vamos a hacerla más amplia, porque creemos que es importante dar a conocer estos gestos de respeto a las creencias y rescate de los valores en momentos en que hay que resaltar el diálogo por sobre los conflictos».

A su vez, durante el acto se reconoció con el premio «Espíritu Maccabi», con el cual es galardonado una persona o institución por su comprometida acción pública. En esta ocasión, recibió la distinción la 1era Compañía de Bomberos Concepcion, por ser un ejemplo de compromiso y servicio público; a su vez, destacaron que la Compañía porta el pabellón de Israel en la ciudad.

Posteriormente y a modo de cierre de la jornada, las instituciones comunitarias presentes participaron de un almuerzo en el «Club Concepción».