Revista Shalom: 85 años de la Logia Pacífico
Fuente: Revista Shalom – noviembre 2021
Por Ana María Tapia, Presidenta Logia Pacífico | B’nai B’rith Chile
“La vida es una continua lucha por alcanzar la belleza, la verdad, la fraternidad y el amor. Cuando en nuestras vidas temporales nos esforzamos por lograr estos ideales, compartimos la inmortalidad de aquellos inmutables valores, a las que congregamos nuestras mejores energías”.
Ritual B’nai B’rith Chile
La B’nai B’rith del fin del mundo
La Logia Pacífico, fundadora de B’nai B’rith en Chile, celebró el pasado 20 de octubre de 2021, 85 años de vida plena. Desde el año 1937, ha trabajado incansablemente por hacer realidad los ideales de Benevolencia, Fraternidad y Concordia de la Hermandad internacional en nuestro país. Nuestros Hermanos mayores, quienes dieron inicio a la institución local, eran inmigrantes, provenientes de tierras lejanas, quienes llegaron hasta el fin del mundo buscando refugio.
Grandes personas que, agradecidos del país que los acogió, devinieron en ejemplares ciudadanos que aportaron lo mejor de sí para el desarrollo de nuestra nación.
Los fundadores del capítulo local, enmarcados en la Logia cuyo nombre hace honor al océano que “tranquilo baña” a las costas de nuestro país, se reunieron en torno a conceptos guías que permanecen indelebles y rigen el comportamiento y los Trabajos que realizamos hasta nuestros días. Estos conceptos son Crecer, Servir y Actuar. A través de ellos, se busca el desarrollo del individuo quien, manteniendo y reafirmando su identidad judía, debe ser un ciudadano comprometido con el país y su labor de servicio, la cual debe estar dirigida tanto a miembros de la comunidad judía, como de la sociedad toda.
“La Logia ha tenido una importancia social para nosotros porque es una institución filantrópica donde se combinan dos aspectos muy importantes: la filantropía y la sociabilidad”, en palabras del QH Alfredo Blüh (ZL). El fin del actuar del Benbrith, es contribuir a que el mundo sea un mejor lugar para todos, ello se logra, con una acción que propende a garantizar la seguridad y derechos del Pueblo judío y del Estado de Israel, trabajando de igual modo, por construir una sociedad pluralista y no discriminadora para todos.
La Revolución Femenina y la continuidad
La Logia Pacífico, surgió como una continuidad de las Logias europeas de las cuales provenían nuestros fundadores, y se mantuvo muy apegada a la normativa que las regía. Hasta que, en la década de 1970, bajo la presidencia del QH Lutz Simonsohn, se produjo un cambio revolucionario para la época, incluyendo por primera vez en la historia de la institución, tanto a nivel nacional como internacional, a una mujer como vicepresidenta, siendo la QH Nelly Hoffman honrada con este nombramiento. Esta acción permitió incorporar a mujeres a las líneas de B’nai B’rith, dando nueva vida y un nuevo enfoque a las actividades institucionales.
“La Pacífico”, como cariñosamente hablan de ella los miembros de B’nai B’rith, ha constituido un pilar importante para la vida de quienes la componen. Este espacio, les ha permitido pertenecer a un grupo humano en el que, en palabras de la QH Ruth Katzmann (ZL), “uno se siente identificada y bendecida por sus miembros”.
“Es como pertenecer a una familia, uno se interesa por lo que les pasa a los demás, y los demás se preocupan a su vez por lo que le pasa a uno”, recordaba la QH Edith Gejman (ZL).
La permanencia en el tiempo de Filial Pacífico se debe a que, desde un comienzo participaban miembros de diferentes edades. El QH Leo de Jong, decía por entonces que, “si hay -Hermanos- de sólo una edad, la Filial está condenada a morir”. A partir de esa idea, se buscó incorporar gente más joven, con el propósito de “bajar el promedio de edad de la misma, con gente que se interesara en los valores de la institución”. Como resultado de esta preocupación, se incorpora a la institución la actual presidenta de la Filial, la QH Ana María Tapia Adler, quien recuerda: “Estaba él -Leo de Jong- tan convencido de lo que decía, me resultaba tan sincero ese deseo de que la Filial fundadora continuara… que fue imposible negarse. Es así, como el 3 de noviembre de 1999, tuvo lugar una emocionante ceremonia en la que nos iniciamos un grupo de cinco personas, dispuestas a crecer junto a nuestros “Hermanos mayores” y a aprender del ejemplo que nos brindaban”.
Nuestro legado: Un compromiso con nuestros valores eternos.
La define también su visión formadora, siendo así que, con ocasión de la celebración de sus 70 años, la Filial, hizo entrega de un numero considerable del libro de Rituales y reglamentos de la Institución, con la finalidad de que cada uno de los integrantes de B’nai B’rith, tuviera uno propio, pudiera leerlo, estudiarlo y hacerlo suyo. El Ritual es importante, porque posee poder, es capaz de entregar a quien lo cumple la fuerza y constancia necesaria para emprender un proyecto y cumplirlo, el rito aúna, hermana, cohesiona.
“La Logia Pacífico es especial. La constancia y el esfuerzo de sus integrantes por permanecer en el tiempo. El compromiso con los valores de la institución que fundaron en nuestro país, está fuertemente arraigado en el compromiso con los valores eternos del judaísmo y la educación judía… es admirable”.
QH Leo de Jong
Con motivo de la celebración de sus 80 años, la Filial tomó la iniciativa de crear la “Fundación para la Preservación de la Memoria del Judaísmo Chileno”.
Ella posee personería jurídica, y da origen al Archivo Judío de Chile, institución que tiene como misión el recopilar y preservar la historia y memoria de los judíos de Chile. Está reconocido por el Consejo Internacional de Archivos de la UNESCO, por el Archivo Central de la Historia del Pueblo Judío, con sede en Jerusalén; por la Red Patrimonial de Archivos Judíos Latinoamericanos, por el Archivo Nacional de Chile y otras instancias a nivel internacional.
En sus 85 años, la Filial recibe con alegría, el que la postulación del Archivo Judío de Chile como Patrimonio Histórico del país, haya sido aceptada. Este es un legado de suma relevancia para la preservación de la memoria de la comunidad judía, de los judíos de Chile y un gran aporte para el patrimonio cultural del país. En este proyecto visionario, “la Pacífico” ve su continuidad en el tiempo. Es el legado que sus integrantes desean dejar al país que los acogió cuando lo necesitaron.
Es de esta forma que, relatado en las significativas palabras del QH Lutz Simonsohn, un grupo de “inmigrantes Ashkenazim de Europa Central y Oriental, y Sefaradim, de la cuenca del Mediterráneo, a pesar de la dura tarea de forjarse una existencia en su nueva patria, sintieron la necesidad moral de establecer la Hermandad b’neibrithiana en Chile, y trasplantar a este último rincón del mundo los ideales que a todos nosotros todavía nos animan”. Hoy 85 años después de aquel 20 de octubre de 1937, seguimos adelante en la tarea que originaron nuestros fundadores, con el mismo amor, la misma entrega y la misma pasión de aquel primer día.